La estrategia de Costa Rica para el carbono azul y la resiliencia climática

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Costa Rica está tomando medidas enérgicas para proteger y restaurar sus ecosistemas de carbono azul, como los manglares, las praderas marinas y las marismas saladas, que desempeñan un papel crucial en la captura de carbono, la preservación de la biodiversidad y el fortalecimiento de la resiliencia costera. En su presentación de la NDC de diciembre de 2020, el país se comprometió a conservar y restaurar los humedales costeros como parte de una estrategia más amplia para promover soluciones climáticas naturales y apoyar los medios de vida sostenibles de las comunidades costeras.

La NDC de Costa Rica incluye compromisos para proteger y restaurar los ecosistemas de carbono azul. Para 2025, el país pretende salvaguardar el 100% de los humedales costeros identificados en su Inventario Nacional de Humedales, incluidos más de 22.000 hectáreas de manglares. También está priorizando la restauración de zonas de humedales clave y el desarrollo de planes de gestión y seguimiento que fomenten una administración sostenible y basada en la comunidad. Paralelamente, Costa Rica está explorando mecanismos de financiación innovadores, como la ampliación de su programa terrestre de pago por servicios ecosistémicos a un programa de pago por servicios ecosistémicos marinos centrado en la costa, para proporcionar reconocimiento e incentivos a las comunidades que conservan activamente estos ecosistemas vitales.

Para poner en marcha los objetivos descritos en su NDC, Costa Rica lanzó su Estrategia Nacional de Carbono Azul en 2023. Basada en marcos legales tanto nacionales como internacionales, la estrategia hace hincapié en la sostenibilidad ecológica, el desarrollo económico y el bienestar humano. Las acciones clave incluyen la promoción de la restauración, la gestión sostenible y la conservación de los ecosistemas de carbono azul; el establecimiento de directrices y criterios oficiales para el registro de proyectos de carbono azul para 2025; y la creación de mecanismos financieros para apoyar la gobernanza y la administración a largo plazo.

Un componente notable de la estrategia apoya al Banco Central de Costa Rica en el desarrollo de una metodología estandarizada, para 2030, para la valoración económica de los servicios de los ecosistemas de carbono azul, incluyendo, pero no limitado a, el secuestro de carbono. Este marco está diseñado para mejorar la coordinación entre las instituciones públicas y garantizar la alineación con los objetivos de la NDC de Costa Rica.

En 2024, Costa Rica organizó un taller nacional para evaluar el progreso de sus objetivos de humedales costeros e identificar oportunidades de financiación alineadas con su NDC. El taller reunió a partes interesadas y expertos nacionales para revisar los avances en la financiación del clima y la conservación, identificar las lagunas normativas y políticas, promover la participación local y apoyar la creación de indicadores medibles para guiar la planificación financiera. Se hizo hincapié en el desarrollo de fuentes de financiación sostenibles y a largo plazo para las iniciativas de carbono azul. Las conclusiones de este taller están sirviendo de base para el desarrollo de la NDC 3.0 de Costa Rica, que seguirá aprovechando el liderazgo mundial del país en la acción por el carbono azul.

El enfoque proactivo de Costa Rica demuestra cómo los compromisos climáticos pueden traducirse en estrategias viables, resultados medibles y procesos inclusivos. Al integrar soluciones basadas en la naturaleza, como el carbono azul, en su marco de la NDC y ser pionera en mecanismos de financiación innovadores, Costa Rica ofrece un modelo replicable para los países que pretenden mejorar la resiliencia y aumentar la ambición en el marco del Acuerdo de París.

Más información sobre el desarrollo de los objetivos de carbono azul de Costa Rica está disponible en este Insight Brief.