Componente 4

Integración de los objetivos climáticos

La planificación y movilización de inversiones alineadas con el clima se mantendrá mejor y será más impactante si los objetivos climáticos del país, tal como se describen en las NDC, los NAP y las LT-LEDS, se integran completamente en los procesos más amplios de planificación económica y de desarrollo y en la elaboración de presupuestos.

La integración requiere, en primer lugar, comprender los cambios sistémicos a largo plazo que pueden ser necesarios en la infraestructura económica y social para avanzar hacia un desarrollo con bajas emisiones y resiliente al clima, y luego construir vías de transición justas hacia los marcos de planificación y financiación sectoriales. La integración del clima en el mandato y las herramientas de los ministerios de economía y finanzas y la identificación de oportunidades para ecologizar los sistemas financieros también ayuda a la integración de los objetivos climáticos. La integración ayuda a los países a movilizar recursos externos y a redirigir los flujos financieros internos en consonancia con los objetivos climáticos.

Paso 9

Mapear los marcos nacionales y sectoriales de planificación, presupuesto y financiamiento y sus sinergias con la implementación de objetivos climáticos

El mapeo de los marcos nacionales y sectoriales existentes de planificación, presupuesto y financiación implica la identificación y el análisis sistemáticos de los marcos clave de planificación, presupuesto e inversión dentro del sector público para discernir oportunidades y carencias. Este proceso integral incluye la evaluación de iniciativas del sector público como la planificación nacional y sectorial; las políticas financieras, económicas y fiscales; y los marcos presupuestarios diseñados para asignar fondos públicos y promover la ecologización del sistema financiero.

Ejemplo: Ruanda mapeó sus marcos de inversión existentes, incluida la Estrategia de Crecimiento Verde y Resiliencia Climática (GGCRS), para alinearlos con sus prioridades de NDC y ODS. A través de la participación de las partes interesadas con los organismos gubernamentales, los inversores privados y los socios para el desarrollo, el país identificó y validó prioridades de inversión clave como la energía renovable, la agricultura sostenible y la resiliencia urbana. Este proceso también reveló lagunas en la financiación y la coordinación, que se abordaron a través de iniciativas de creación de capacidad y reformas políticas específicas. El resultado fue una cartera de proyectos financiables que atrajo con éxito la financiación internacional y del sector privado, lo que demuestra la eficacia de este enfoque estratégico.


Paso 10

Crear una hoja de ruta para integrar los objetivos climáticos en las políticas de planificación nacionales y sectoriales, la elaboración de presupuestos y los marcos de inversión

El desarrollo de una hoja de ruta para integrar y alinear los objetivos climáticos con las políticas de planificación nacionales y sectoriales, la elaboración de presupuestos y los marcos de inversión tiene como objetivo sincronizar los objetivos y los plazos asociados, y definir claramente las funciones concretas de implementación para las diversas partes interesadas involucradas.

Un instrumento importante en este proceso es el etiquetado presupuestario climático (CBT, por sus siglas en inglés), que permite a los gobiernos clasificar, rastrear y evaluar los gastos públicos relacionados con la acción climática. Al etiquetar las partidas presupuestarias que contribuyen a los objetivos climáticos, los responsables de la formulación de políticas pueden garantizar que los recursos financieros se asignen de manera eficiente y eficaz para lograr los objetivos climáticos. El CBT también mejora la transparencia y la rendición de cuentas, lo que facilita el seguimiento de los progresos y el ajuste de las estrategias según sea necesario. La integración de esta herramienta en el marco presupuestario ayudará a alinear mejor la planificación financiera nacional y sectorial con los objetivos climáticos generales.

Ejemplo: La Iniciativa de Desarrollo Bajo en Carbono (LCDI) de Indonesia integra los objetivos climáticos en su planificación nacional y sectorial a través del Plan Nacional de Desarrollo a Medio Plazo (RPJMN), alineando los objetivos climáticos con los objetivos de desarrollo económico y social. La iniciativa prioriza sectores clave como la energía, la silvicultura y la agricultura, al tiempo que aprovecha los modelos basados en datos para demostrar los beneficios económicos de las políticas bajas en carbono. Indonesia también introdujo herramientas fiscales como los bonos verdes y la fijación del precio del carbono para alinear los presupuestos con los objetivos climáticos y movilizar la financiación. Para abordar las carencias, como la limitada coordinación institucional y la capacidad técnica, la LCDI implementó programas de desarrollo de capacidades y mejoró la colaboración intergubernamental. Este enfoque ha integrado la acción climática en la agenda de desarrollo de Indonesia, promoviendo el crecimiento sostenible y la resiliencia.


Paso 11

Evaluar las oportunidades de ecologizar los sistemas financieros

Aprovechar la hoja de ruta desarrollada en el Paso 10 explorando las oportunidades para facilitar la redirección de los flujos de inversión públicos y privados hacia vías alineadas con el clima. Esto puede implicar varios enfoques, incluyendo la Gestión de las Finanzas Públicas (GFP), la Gestión de la Inversión Pública (GIP), la Administración y Gestión Pública (AGP) y la contratación pública, entre otros. También puede implicar trabajar con actores clave del sistema financiero, como los bancos centrales y los reguladores, para integrar de forma más sistemática los riesgos climáticos en la toma de decisiones.

Ejemplo: Jamaica, con el apoyo de la NDC Partnership, a través de la Agencia Francesa de Desarrollo (AFD), ha evaluado las oportunidades para ecologizar sus sistemas financieros, alineándolos con sus objetivos climáticos. Los esfuerzos clave incluyen la exploración del desarrollo de un mercado de bonos verdes para atraer la inversión del sector privado para la energía renovable y la infraestructura resiliente, así como la creación de capacidad de las instituciones financieras para integrar los criterios ambientales, sociales y de gobernanza (ESG) en las prácticas de préstamo. El país también ha introducido reformas políticas para incentivar las inversiones bajas en carbono e involucrado a las partes interesadas para identificar las barreras y oportunidades para la financiación sostenible. Estas iniciativas han fortalecido el sistema financiero de Jamaica, permitiéndole apoyar mejor la implementación de la NDC y promover la resiliencia climática.

Los bancos centrales desempeñan un papel clave en la acción climática. Son cruciales para salvaguardar la estabilidad financiera, enviar señales de mercado consistentes y persistentes con respecto a los riesgos y oportunidades relacionados con el clima e implementar las medidas correctivas necesarias para recalibrar el sistema financiero y proteger a las poblaciones vulnerables. Sin embargo, los bancos centrales de muchos países en desarrollo carecen de la capacidad y las herramientas suficientes para abordar eficazmente estos desafíos.

Durante la COP26, la NDC Partnership lanzó la iniciativa de Apoyo de Preparación para la Ecologización de los Bancos Centrales (GCB) en respuesta a las solicitudes de los países en desarrollo. Esta iniciativa dota a los bancos centrales de conocimientos, capacidades institucionales y sistemas para adoptar enfoques de precaución ante el riesgo climático, promover las inversiones verdes y abordar la brecha de financiación climática.

A través de la Iniciativa GCB, los bancos centrales alinean su mandato y sus herramientas de supervisión con la ciencia más reciente para movilizar financiación para las NDC, los NAP y las LT-LEDS, garantizando la estabilidad financiera crucial para la reducción de la pobreza y la equidad, ya que el cambio climático y las crisis financieras impactan desproporcionadamente a las comunidades vulnerables. Hasta la fecha, 18 bancos centrales que cubren 25 países están recibiendo apoyo coordinado en el país a través de la NDC Partnership, de la Agencia Francesa de Desarrollo (AFD), el Ministerio Federal Alemán de Asuntos Económicos y Acción Climática (BWMK), el Banco Europeo de Inversiones (BEI), el Reino Unido (RU) y el Banco Mundial, así como a través del Fondo de Acción de la NDC Partnership (PAF).

Obtenga más información sobre la Iniciativa de Apoyo de Preparación para la Ecologización de los Bancos Centrales, las Experiencias Emergentes y las Recomendaciones aquí.